12 de julio de 2016

El Reino de las Montañas

Este relato empieza cuando la tierra era gobernada por reyes.

Hace tiempo existió un rey que todo el mundo adoraba por su valentía, fuerza, carisma y virtudes de hombre ejemplar.

Tuvo un varón de primogénito y posteriormente más hijos e hijas, todo indicaba que la monarquía se expandiría y que el linaje del rey permanecería por siempre.

El príncipe era un hombre de carácter noble, nada ambicioso comparado con su padre, pero el rey sabia que eso no era bueno para un gran heredero, el rey temía que no tuviera la visión de ganar más territorio para expandir el reinado por todo el mundo, como una vez había soñado el rey por una profecía que le dijeron los antiguos sabios.

Llego el momento en el que el rey convencido de su fuerza, destreza y de su ejercito decidió atacar un reinado del norte, el deseo de su corazón era acabar con todo hombres y animales, y exhibir al rey ante el pueblo y matarlo con su propia espada.

Mientras duraba la guerra el príncipe era entrenado para ser un hombre de guerra, fuerte y valeroso como su padre, pero uno de sus maestros decidió no enseñarle sobre batallas sino de la parte más profunda de un hombre, aquel maestro le enseñaba de las virtudes que están más allá de lo que los ojos logran mirar.

En la batalla el rey era imparable mataba a mas personas con su espada que toda una cuadrilla de su ejercito, sin embargo no cumplió lo que su corazón le había dicho pues le perdonó la vida a las mujeres más hermosas y las hizo suyas, incluyendo a la reina del norte, además de dejar huir al  rey del norte.

Cuando el rey terminó aquella invasión y al ver el gran santuario de los rezos que tenia el reino del norte, decidió no derrumbarlo y usarlo como templo de su reino, en donde combinadas las tradiciones se harían ritos paganos pues participarían los hombre del reino de las montañas y las mujeres del reino del norte.

El príncipe sabía que eso no era provechoso para su reino, pues no tendrían una identidad propia. Las mujeres del norte dominaban a los hombres del reino de las montañas, seduciéndolos con sus encantos de mujer y orillándolos a realizar sacrificios a sus dioses.

Hubo una época en el que el reino de las montañas fue castigado por la Divinidad, el castigo consistía en que dejarían de nacer hombres. En 18 años las mujeres eran dominantes y solo quedaban pocos guerreros, además las mujeres por estatutos de su ley no podían salir a la batalla.

El rey consternado fue a consultar a los sabios del lugar, en ese tiempo los sabios solo eran 12 y 6 de ellos le decían que la Divinidad los estaba castigando por no ir a invadir mas reinos en los últimos años, los otros 6 le decían que la Divinidad estaba enojada por permitir que el paganismo entrara a sus santuarios. Pero el rey decidió solo escuchar la palabra de los primeros sabios.

Llegó el día de alistarse para la guerra, dentro del ejercito se encontraba el rey y sus hijos, solo el príncipe se quedaba a gobernar el reino. Se dirigían a conquistar el reino de las dunas pero tenían que atravesar una corriente de agua, lugar donde ellos nunca habían atravesado pues dentro de su ley los sabios mencionaban que pasando las corrientes de agua la muerte te asechaba, eran tierras extrañas, pero el rey sabia que era un reino muy pequeño pues estaba rodeado de arena y sus actividades eran muy limitadas.

La historia es trágica, los hijos del rey murieron a espada de los guerreros de reino de las dunas, lo más insólito fue que el consejero de ese reino era el prófugo rey del reino del norte, quien exhibió al rey de las montañas frente al reino de las dunas y lo mató, pues así se lo había propuesto en su corazón por haber tomado a su mujer y a sus hijas.

Las noticias malas circulan rápidamente y al día siguiente el reino de las montañas se entero de lo sucedido, también porqué algunos guerreros habían escapado. Las mujeres ahora eran una muchedumbre y ejercieron fuerza para que las dejaran regresar a sus tierras del norte y seguir con sus ritos. Los hombre no tuvieron más remedio que dejarlas ir con todo y sus pertenencias.

El príncipe que ahora ante la ley era el rey, decidió reunir a todos los hombres que aún quedaban e hizo pasar a los 6 sabios que habían aconsejado a su padre, los exhibió ante los hombres de ese lugar y los mataron con piedras, las rocas eran abundantes y formaron un montículo en las orilla de una montaña y con el tiempo se convirtió en el valle de la muerte en donde se espera algún hecho muy trágico.

Los sabios que quedaban le dijeron al rey que su reino no terminaría y que seguiría y seguiría hasta que una próxima profecía fuera entregada, el rey ordenó que los hombres que eran jóvenes fueran esparcidos por todo el mundo y que un sabio acompañaría a cada grupo y así 4 sabios instituirían cada punto cardinal, ademas que el reino del norte se quedaría con 2 sabios como consejeros del rey.

Los hombres que fueron esparcidos tuvieron mujeres y sus mujeres tuvieron hijos varones que lograrían continuar el linaje del reino de las montañas, ademas se convertirían en lideres de sus ciudades por aquella profecía de decía que el reino de las montañas sería extendido por todo el mundo.

El rey del reino de las montañas se casó con una mujer que había regresado del norte, pues ella tenia más identidad por el reino de las montañas que por el reino del norte, puesto que su padre había nacido en el reino de las montañas y guardaban las buenas costumbres de ese reino. Tuvieron muchos hijos pero el primogénito había sido varón, con lo que sabían que la Divinidad había perdonado a su pueblo y tenido misericordia con su tierra…

RAjr

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